Seguramente has escuchado de las dificultades para comprar los gadgets tecnológicos más variados: smartphones, tablets, videoconsolas… Y las memorias USB no son una excepción. A poco que te hayas informado sobre la cuestión, algunas fuentes culpan de la situación a las dificultades que ha vivido el transporte marítimo estos meses, otros apuntan a la escasez de microchips (de la que ya te hablamos). Aunque ambos motivos son compatibles. Ahora también hay que sumar la crisis energética en China.
China tiene un problema de suministro energético para sus fábricas (y también para sus hogares). Como siempre, no hay una única explicación para encontrar el problema de raíz. Hay que mirar la subida de los precios del carbón (principal fuente de suministro para el sector secundario del país asiático), el aumento de la demanda de la electricidad, y unas estrictas normas del gobierno de Beijing para reducir las emisiones de carbono.
Esta política gubernamental es responsable de los principales cortes que afectan a un 44% de la industria en 20 de las 31 regiones del país. Es una cuestión a debate. En un principio el fin de la medida es bueno: recortar las emisiones contaminantes a la atmósfera. El problema no es el objetivo, sino los medios para conseguirlos ya que establece unas cuotas de consumo y cuando se superan hay cortes en la producción.
Con estas medidas del gobierno de Beijing, también pretenden influir en la subida de los precios del carbón (que un gran consumo lo mantenga al alza) y en el aumento galopante de la demanda.
Volviendo a los cortes de las fábricas, estos influyen en el mercado de memorias USB porque la inmensa mayoría se fabrican allí. Además, no solo afecta a este sector, la inmensa mayoría del sector tecnológico se ve afectado, como te hemos comentado a principio del post. Los gigantes de la industria lo están sufriendo: Apple ha tenido problemas con los componentes de algunos de sus últimos lanzamientos.
Mientras que otras empresas también líderes en tecnología o que dependen de ella se encuentran con problemas similares: Nvidia, Mediatek, Dell, HP, Tesla o Microsoft. De hecho, pocos sectores se salvan, al fin y al cabo, no hay que olvidar que, como dicen, “China es la fábrica del mundo”.
Sobre el transporte marítimo también se ha hablado mucho. Aunque, a finales de noviembre de 2021, parece que la situación está volviendo a la normalidad. O por lo menos hay síntomas de recuperación. Después de meses de incertidumbre y precios disparados, el tramo final del año se encara con una caída de las tarifas por encima del 50%.
Esto se debe a cuestiones como que la producción se ha reajustado tras el enorme parón que hubo por los primeros grandes confinamientos por la pandemia de covid-19. Es decir, la situación vuelve a su estado anterior a la primavera de 2020. Los más optimistas auguran que esta enorme bajada se seguirá viendo en los próximos meses. En cualquier caso, estas interferencias en la logística también han influido en las dificultades para tener stocks de USBs.
Aunque tampoco hay que perder de vista la evolución de la pandemia de coronavirus. Conviene recordar que los países asiáticos —con China a la cabeza— apuestan por una política de “covid cero”. Eso implica cierres y ceses de actividades aún más severos que los vistos en Occidente y que afectan especialmente al transporte de mercancías.
Como te hemos dicho, los pendrives se fabrican en China y hay que traerlos en barco —de nuevo, la mayoría de productos se transportan por mar—. Pero lo bueno de las crisis es que se aprende de ellas y se pueden buscar soluciones para mejorar. El colapso vivido en las rutas marítimas puede ayudar a que se apueste por otras alternativas para el transporte como son las líneas de ferrocarril entre Asia y Europa.
Más vale prevenir que esperar, consejos para no quedarte sin tus pendrives
Que no cunda el pánico. A veces las informaciones pueden pecar de alarmismo. Que existan dificultades no quiere decir que sea misión imposible conseguir memorias USBs personalizadas en estos tiempos. El principal consejo es actuar con la máxima anticipación posible. Los cargamentos, aunque lentos, van llegando.
De hecho, las empresas de logística están haciendo esfuerzos para superar estos inconvenientes. Pero nunca hay que perder de vista que puede ser que el modelo concreto que deseemos para nuestra campaña no esté disponible cuando queramos.
Pero esto no implica tener los volúmenes que existían antes de la pandemia. Así que es mejor que actúes con la máxima anticipación y más en estas épocas de finales de año. Con las fiestas navideñas a la vista, la necesidad de regalos de empresa aumenta (ya sea a clientes o para nuestro equipo). Los pendrives promocionales son un regalo recurrente porque es práctico y dan una imagen de compañía alineada con los nuevos tiempos.
La ventaja de trabajar con anticipación no solo influye en asegurarte la disponibilidad del producto. Las situaciones de escasez de productos en los mercados suelen ir acompañadas de subidas de precio. Así que actuar con cierta previsión te evitará que el presupuesto se te descuadre.
Como siempre, si te has quedado con alguna duda puedes ponerte en contacto con nosotros. Te asesoraremos sobre la situación del stock, y qué modelo no te traerá problemas para tu campaña. Todo el mundo podrá tener su memoria USB publicitaria. También nos gustaría conocer tus experiencias con la situación de la logística mundial y se ha afectado a tus promociones de ventas o de branding.
